En
nuestra clase a lo largo de la unidad vamos a jugar con cajas. Con la ayuda de
nuestros papás hemos reunido muchas cajas de distintos tamaños y formas que
nuestros peques los han convertido en un juguete fabulosos en donde a través
del esparcimiento desarrollan destrezas motoras, su imaginación el pensamiento
crítico y el juego simbólico.
Comencé
dándoles las cajas para que ellos las observen, las manipulen y jueguen
libremente.
Pronto
observo que comienzan a tapar y destapar; los niños escogen tapas al azar e
intentan encajar a la fuerza. Después de varios intentos encuentran la tapa que
encaja correctamente.
Apilan
las cajas y construyen grandes torres y encajan cajas unas dentro de la otra.
Con
las cajas de gran tamaño comenzaron arrastrándolos como si fueran coches,
jugaban a entrar y salir, a pasar por debajo como si fueron túneles.
Aún
seguimos jugando, debemos tener presente que el juego es una herramienta de aprendizaje
y que nos hace felices.
Debe
ser un proceso elaborado por el niño a partir de sus experiencias, deseos,
intereses y capacidades.
Este
proceso siempre comienza con la observación del mundo, madura dentro de
nuestros niños a través de la creatividad e imaginación, y la debes realizar
con alegría y entusiasmo. Se retroalimenta través de la práctica y la
manipulación.
Os invito a seguir jugando en casa. |
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